Trump se marcha de reunion de la OTAN en Londres

Al parecer, el presidente estadounidense, Donald Trump, tuvo dos días turbulentos en la cumbre de la OTAN en Londres; y aunque prometió portarse bien, terminó marchándose enfadado y dando un portazo.

"Creo que hemos dado ya muchas ruedado de prensa", dijo a los periodistas en Watford al término de la cumbre con motivo del 70° aniversario de la Alianza Atlántica.

Posteriormente se marchó directamente a Washington anulando el que debía ser su gran momento con los medios, sin dar más explicaciones.

Además, varios líderes mundiales, tal y como el presidente de Canadá, Justin Trudeau, fueron captados burlándose de Trump en dicha cumbre; sin embargo, ya había aprovechado los encuentros con otros líderes para hablar largo y tendido con los medios.

"Llegó tarde porque su rueda de prensa (con Trump) duró 40 minutos", broméo el canadiense en imágenes captadas por las cámaras durante una recepción el martes en el palacio de Buckingham.

Trudeau en ese momento estaba entablando una plática con el británico Boris Johnson, el francés Emmanuel Macron, el holandés Mark Rutte y la princesa Ana sobre un retraso del estadounidense, pero en el vídeo solo se escuchan sus palabras.

El mandatario canadiense intentó minimizar su cato, explicando que había "hecho referencia a una rueda de prensa impresiva" antes de su encuentro con Trump, con quien mantuvo "buenas conversaciones".

TRUDEAU ES "DOS CARAS": TRUMP

El vídeo compartido en las redes sociales de Trudeau no le sentó nada bien al presidente de los EEUU, Donald Trump. Y fue tanto que dijo que Justin Trudeau "es un tipo muy simpático, pero tiene dos caras". 

"Le llamé la atención sobre el hecho de que no está pagando el 2 por ciento del PIB canadiense como contribucción a la OTAN" e imagino que no está muy contento por eso", dijo tratando de justificar las aparentes burlas".

Éste no fue el único encontronazo que tuvo el empresario millonario, durante los dos días de la cumbre calificó de "insultantes" unas declaraciones de Macron sobre la "muerte cerebral" de la OTAN y calificó como delincuentes a los países que como Alemania o España, no gastan el 2 por ciento de su PIB en defensa.

Igual tuvo que soportar que su anfitrión Johnson eludiese aparecer en público por temor a que su asociación con el estadounidense, importante en Reino Unido, le perjudicase a una semana de las elecciones legislativas.