Falta de financiamiento provoca muerte en las Pymes

Tras dos años de la fuerte crisis que ha generado la pandemia de COVID-19, las pequeñas y medianas empresas deben buscar nuevas oportunidades para crecer. ¿Cómo hacerlo? Esta es una de las preguntas más recurrentes en la mayoría de los empresarios en México. La respuesta no es sencilla, pues existen varios factores que debemos tomar en cuenta. 

Uno de ellos es el flujo de efectivo, por ser determinante para la operación. El cash flow es uno de los estados financieros más importantes para evaluar la posición financiera y la viabilidad de los negocios. 

Si bien la economía se recupera poco a poco, aún no estamos en los niveles óptimos de operación. Para las empresas, esto representa una complicación pues su flujo de caja se ve afectado, sobre todo para aquellas que otorgan plazos de pago a sus clientes. 

Para que las Pymes puedan resolver su falta de liquidez, tienen que buscar el financiamiento más apegado a las necesidades que necesitan cubrir; de lo contrario, esta carencia puede provocar serios problemas, incluso la muerte. 

Es bien sabido que el acceso a financiamiento para las pequeñas y medianas empresas es complicado, pues las instituciones financieras tradicionales les piden una serie de requisitos que es difícil cumplir, además de que los tiempos de espera suelen resultar largos. En ocasiones los empresarios recurren a una práctica poco funcional: los préstamos personales. Aunque pueda parecer una solución, a la larga se convierte en un problema ya que estos préstamos no están diseñados para las necesidades de las Pymes.

La falta de liquidez se genera cuando los emprendedores no realizan una buena planeación estratégica, pero sobre todo cuando no revisan la salud financiera de su empresa: Esto puede ocasionar la muerte del negocio; de ahí la importancia de contar con un plan de uso de efectivo.

Los planes de uso de efectivo ayudan a que los empresarios sean más conscientes de cuánto efectivo tienen, cuánto deben y cuánto recibirán y busquen que se utilice de forma eficiente. Así podrán hacer ahorros significativos, además de saber en qué se invierte el dinero y, sobre todo, implementar acciones que eficienten las finanzas. Esto puede parecer algo natural, pero muchas veces los líderes lo olvidan y provocan graves daños, incluso la desaparición de sus empresas.

Definitivamente la pandemia dejó diversas enseñanzas para las empresas; una de las más importantes es que el efectivo es el rey. En otras palabras, priorizar el flujo de efectivo y la liquidez. En caso de que el efectivo disponible en la cuenta no sea suficiente para operar, es posible recurrir a instituciones no tradicionales de crédito para solicitar el apoyo necesario para salir adelante. 

Algo que hay que tener muy claro es que adquirir deuda no es malo. Bien manejada, puede rendir buenos resultados; todo depende del plan que se decida seguir para su uso. Lo que es un hecho es que, para que una empresa sobreviva y alcance el éxito, es necesario que cuente con un plan de uso del efectivo para cuidar su liquidez y, por supuesto, evitar ser parte de las estadísticas que indican que las Pymes mueren en sus primeros cinco años de vida. 

Colaboracion de:

Claudio Kandel

Director de DISI operaciones, ha sido, director de productos financieros en Banco Azteca, director de riesgo de crédito y director de operaciones en HSBC, gerente de marca de "Western Union: Dinero en Minutos" en Elektra, entre otros. Cuenta con amplia experiencia en el sector financiero, tanto en México como en el mundo.