Audi construirá una Planta para vehículos eléctricos en Puebla

La automotriz alemana Audi tiene un objetivo claro a nivel global: dejar de vender vehículos a combustión interna para 2033. Y la planta de Puebla ya se prepara prepara para migrar hacia la electrificación.

El complejo está sobre un terreno de 460 hectáreas, de las cuales 200 están destinadas a la producción de modelos a gasolina y otras 60 hectáreas a almacenes. En las 200 hectáreas libres del complejo, la compañía prevé realizar una “planta espejo”, en la que ensamblará la versión eléctrica de Q5.

“Estamos preparados para la electrificación, aquí hay mucha mano de obra altamente calificada… Tenemos planes en el futuro para esta planta. No puedo decir más sobre estos planes, solo que toda el área (libre) es para duplicar la planta, como una planta espejo”, menciona Tarek Mashhour, CEO de la planta mexicana de Audi.

El directivo detalló que la única diferencia que habrá entre el modelo a combustión interna y la versión eléctrica es el motor eléctrico y la batería, por lo que su cadena de proveeduría se mantendr prácticamente sin cambios. “No va a cambiar tanto, porque el único cambio es el motor, el otro es un motor eléctrico, pero todo el resto del auto es como hoy, los proveedores prácticamente son los mismos”, añade.

Pese a que aún no hay una cifra exacta sobre cuánto estará invirtiendo la compañía alemana para la nueva producción, Mashhour señala que la inyección de capital será de millones de dólares. “Se cuentan con todos los proveedores, hay que desarrollar naves para la estructura, baterías que no se tienen”, añade.

Otros fabricantes han destinado alrededor de 1,000 millones de dólares para reconvertir sus plantas actuales en México para producir vehículos eléctricos

Unos 180 proveedores abastecen hoy a la planta, de los cuales 70% están establecidos en Norteamérica, y Mashhour buscará mantener una integración similar para sus modelos eléctricos, lo cual requerirá del desarrollo de nuevos proveedores de los componentes del sistema eléctrico. 

Uno de los mayores retos que tendrá Audi -y todos los fabricantes que busquen producir vehículos eléctricos que cumplan con las reglas del T-MEC- es contar con una producción de baterías en la región o, en su defecto, ensamblarlas ellos mismos.

La electrificación de la gama requerirá que la red de plantas de Audi migre hacia esquemas productivos más sostenibles. A nivel global, la firma tiene por objetivo que en 2025 todas sus plantas alcancen la neutralidad de carbono.

En 2018 el complejo en Bruselas, donde se ensambla el Audi A3, fue el primero en alcanzar la neutralidad de carbono dentro de la red de plantas de Audi, certificándose también como la primera planta de producción de alto volumen de vehículos premium cero emisiones en el mundo, a través de la coexistencia de un sistema fotovoltaico con una superficie de 107,000 metros cuadrados, además de la utilización de biogás.

Pablo Álvarez, planeador ambiental de la compañía en México, resalta que son cuatro los ejes de acción de Audi para avanzar hacia su objetivo: la descarbonización, el cuidado del agua, una menor emisión de residuos y preservar la biodiversidad existente en el complejo.

Actualmente la planta utiliza gas natural para alcanzar la temperatura necesaria en algunos de sus procesos como el prensado del aluminio y del acero, la soldadura de las carrocerías y la pintura de las unidades, pero ya se encuentra analizando otras alternativas de suministro.

“Lo que estamos analizando ahorita puede ser desde cambiar el calor por electricidad, que obviamente tendría un mayor costo. O tal vez empezar a buscar combustibles alternos, como biogás. Estamos en una fase muy inicial, haciendo estudios de geotermia, pero no es tan fácil”, agrega Álvarez.

La planta cuenta con un almacén de residuos donde cada año se reciclan aproximadamente 30,000 toneladas de metales, principalmente de acero y aluminio, además de una planta de ósmosis inversa en la que se trata el agua utilizada en los procesos, mediante la cual se alcanza una recuperación del 93% del agua.