Condiciones desfavorables de financiamiento a Pymes

Aumento en las tasas de interés y menor apetito al riesgo por parte de los inversionistas, es el panorama que les espera a las micro, pequeñas y medianas empresas (Pymes) que busquen financiamiento en la nueva normalidad, por lo que son los intermediarios financieros no bancarios y las fintech las que pueden dárselos. Durante su participación en el festival de financiamiento INCmty, organizado por el Tecnológico de Monterrey.

El presidente de la Asociación Mexicana de Sofomes (Asofom), Fernando Padilla, aseguró que la crisis puede significar una importante oportunidad para hacer crecer a las empresas, pero es necesario mantener liquidez a fin de sobrevivir a la temporada. Padilla mencionó que la estrategia debe incluir capital de parte de los accionistas y un buen acceso al financiamiento, por lo que mencionó que la deuda es mucho más barata que el capital propio. 

Agregó que en el corto plazo está prevista una menor oferta al financiamiento por parte de la banca, así como montos y plazos más reducidos y una tasa de interés más alto; sin embargo, aseguró que son los intermediarios financieros no bancarios y las fintech los que pueden asumir el riesgo de otorgar financiamiento al 70 por ciento de las Pymes que no lo han podido conseguir. 

 Sin embargo, muchas empresas o emprendedores no conocen el financiamiento a través de instituciones distintas a los bancos. “Traemos un gran reto las empresas en México y el sector financiero también. Hoy en día hay que cuidar más que nada a los clientes, satisfacer sus necesidades, cubriéndolas con un producto o servicio, tener un mercado y clientes consolidados con una propuesta de valor de manera diferenciada para tener éxito”. Padilla recordó que el 99 por ciento de las empresas, incluyendo al sector informal, en México son Pymes, ya que se estima que existen más de 6 millones de unidades económicas, de las cuales, el 65 por ciento son empresas formales, estas generan más de la mitad del empleo formal y el 52 por ciento del producto interno bruto.

“Claramente son el principal jugador económico del país. Se caracterizan por tener menos de 200 empleados y facturan menos de 250 millones de pesos en ventas al año, y tienen la mayoría de las veces un perfil familiar”.